El jueves pasado nos acompañó en el Círculo de Estudios del Club de Periodistas, el filósofo Enrique Dussel, quien expuso una muy interesante plática sobre el poder político, el poder popular y de ahí todas las articulaciones del poder.
¿Qué es el poder? Este concepto abstracto puede entenderse como el poder hacer algo, el poder también es fuerza, y para ejercer un poder es necesario estar vivos, ser seres vivientes que deben tener cubiertas ciertas necesidades, seres vivientes con voluntad de vida.
El poder reside, como fuerza, en la voluntad de vida de un pueblo, pero si no se tiene voluntad comunitaria no se tiene nada, o si en una comunidad cada quien tira para su lado y se es un pueblo de egoístas, tampoco.
El poder es voluntad de vida y si esta voluntad está acordada con fines precisos y se ejerce una manera racionalmente acordada, entonces se vuelve un poder popular. El poder es entonces voluntad de vida acordada con fines precisos y por ello reside en el pueblo. El verdadero poder no está en que un gobernante lo ejerza de manera autoritaria y contra la voluntad ciudadana, no está en la voluntad de ejercerlo porque es decisión de alguien, aunque se apoye en instituciones como el ejército, los medios, las transnacionales, los medios, etc, ese es un poder fetichista falso, el verdadero poder solamente reside en el pueblo, y el pueblo tiene instituciones para ejercerlo, pero cuando estas instituciones se corrompen o ya no sirven para sus fines, deben cambiarse, transformarse, o como bien dice nuestro Presidente Legítimo, irse al diablo. La comunidad crea sus instituciones políticas para poder ejercer el poder, y las instituciones deben permitir ejercer democráticamente el poder, pero si no funcionan se les debe cambiar. Las instituciones son para que los gobernantes manden obedeciendo, para que el pueblo pueda ejercer, como llama Evo Morales, un poder obedencial. Los grandes políticos como nuestro Presidente Legítimo, Andrés Manuel López Obrador, son personas humildes que obedecen la voluntad del pueblo, que mandan obedeciendo, que ejercen un poder obedencial. Cuando el poder popular se ejerce, es un poder que fiscaliza a los otros tres poderes, al ejecutivo, al legislativo y al judicial, entonces existe democracia porque se establecen acuerdos legítimos, donde todos hemos podido participar de la misma manera. El poder popular se construye desde abajo, como dice nuestro Presidente Legítimo, desde abajo y con la gente. Es necesidad y reto de nuestro movimiento social construir y organizar el poder ciudadano, el poder popular, tenemos líder, tenemos cada vez más gente consciente, como nunca antes, continuemos construyendo el poder popular hasta la victoria.
*Reseña y foto de Teresa Moreno
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